El gato que le cambió la vida a su dueño
James Bowen era un músico callejero de Londres. Vivía de las propinas de la gente. Llevaba una vida desastrosa en todos los sentidos y vivía en una minúscula habitación.
James Bowen era un músico callejero de Londres. Vivía de las propinas de la gente. Llevaba una vida desastrosa en todos los sentidos y vivía en una minúscula habitación.
Brutis era un golden retriever normal, con un precioso pelo dorado. Como todos los de su raza, poseía un carácter apacible y cariñoso.
Los gatos son capaces de segregar feromonas con muy distintas funciones. Pueden tener un sentido territorial o reproductivo, pero también lo utilizan las madres gatas para tranquilizar a sus gatitos.
Los perros y el ser humano mantienen una larguísima amistad de más de 15.000 años. Instintivamente, los humanos siempre supimos que la compañía de los perros mejoraba nuestras vidas, sobre todo desde el punto de vista emocional.
La causa es que no existe una verdadera relación entre el hombre y el perro. Hombre y perro no se comunican entre sí. Todos los problemas que he remunerado dejan claro que el perro se comporta incontroladamente. Ni se somete al control de su dueño ni es capaz de controlar sus acciones por sí mismo.
El perro experimenta su mundo de forma binaria, es decir, en el sentido de éxito o fracaso. Se organiza orientándose en dos direcciones opuestas: da resultado no da resultado. En principio, se orienta hacia una solución, siguiendo el lema de <